- Evita las cuatro «D»: Descalificarla personalmente, Denigrarsus conductas, Devaluar sus logros y mostrar una actitud Defensiva).
- Empatiza: al comenzar una discusión recuerda que probablemente, tu pareja no buscaba fastidiarte con lo que ha dicho o hecho.
- Reconoce errores antes de señalar únicamente los de tu pareja
- Marca un objetivo claro en la discusión y no dejes que se desvíe. Si estás muy enfadado, cansado o bebido, es mejor no discutir. Mejor dejarlo para mañana.
- No mueras por la verdad. Lo importante no es tener razón sino conseguir llegar a un consenso.
- En pareja, solo se gana una discusión cuando los dos han cedido.
- Mira hacia delante. Una buena discusión es la que tienen como conclusión una manera de hacer las cosas en el futuro.
De todos es sabido que la base para que una relación funcione es una buena comunicación, por lo que las discusiones sirven en la mayoría de ocasiones, para opinar sobre diversos temas, conocer otros puntos de vista, las inquietudes del otro etc. Pero como todo en la vida, hay un límite, una delgada línea que separa la discusión del ataque personal o de la pelea.